Lo que no te cuentan sobre el mediatizado cobayismo humano en Guatemala
Estos experimentos NO son un hecho aislado
(1ª parte)
Alfredo Embid
o Los experimentos se realizan preferentemente en países extranjeros empobrecidos
o Los experimentos siempre son dirigidos y realizados por una o varias instituciones y organismos médicos “respetables”.
o Los experimentos humanos se realizan prácticamente siempre en una población no blanca; negros, latinos, indios, etc.
o Los experimentos se realizan preferentemente sobre poblaciones indefensas
o Los sujetos de los experimentos están desinformados y son engañados
o Los responsables siempre tienen excusas para justificar su comportamiento criminal
o Transcurren décadas antes de que las atrocidades se den a conocer
o Las autoridades responsables presentan disculpas décadas después, cuando la mayoría de los cobayas humanos han muerto.
o Se tranquiliza a la gente diciendo que los expertos investigan el caso
Hace una semana los medios de comunicación se han llenado con la noticia de que el gobierno de Estados Unidos, acaba de reconocer que realizó experimentos médicos transmitiendo la sífilis durante la década de los 40 (46-48) en Guatemala a unos 700 soldados, reclusos, prostitutas y enfermos mentales[1] Este mea culpa ha venido acompañado de toda una serie de declaraciones que pretenden convencernos de que esto era un hecho excepcional de épocas pasadas, que en la actualidad es impensable. También de declaraciones de intenciones para investigar los hechos a fondo y de buena voluntad al reconocer los errores pasados.
No seria mala idea que te hicieses algunas preguntas: si efectivamente estos experimentos son un caso aislado, y en qué contexto histórico se hicieron, quién gana con este reconocimiento y por qué se produce ahora.
Estos experimentos NO son un hecho aislado
El caso de Puerto Rico.
Los portorriqueños también han sido utilizados por años como “animales de experimentos” por parte del gobierno de Estados Unidos según el doctor Héctor Pesquera Sevillano, presidente del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano (MINH). [2]
Lo ocurrido en Guatemala ha sido una realidad durante décadas en Puerto Rico, que “Estados Unidos ha utilizado como un laboratorio experimental bacteriológico y químico”... “Eso que ha ocurrido en Guatemala hay que enmarcarlo en el contexto de las prácticas abominables de lo que hace Estados Unidos en sus colonias y neocolonias”.
Recordó que en 1932 el dirigente nacionalista puertorriqueño Pedro Albizu Campos denunció, tal como se confirmó después, que el médico estadounidense Cornelius Rhoads inyectaba células cancerosas a pacientes que trataba por anemia en el hospital “Ashford Presbyterian Community”, ubicado en El Condado, sector turístico de San Juan.
“Este científico criminal estaba financiado por la Fundación Rockefeller y tras ser descubierto por un nacionalista, que le dio la información a Albizu Campos, nunca fue enjuiciado”.
Tiene razón, en 1931, el Coronel Dr. Cornelius Rhoads, que trabajaba concretamente para el Instituto Rockefeller de Investigaciones Médicas, realizó experimentos infectando, por supuesto sin su conocimiento a decenas de portorriqueños con células cancerosas. Como mínimo trece de sus víctimas murieron.
Además de inyectar a los pacientes anémicos con células de cáncer les administró elementos radiactivos para estudiar sus efectos en el Hospital Presbiteriano de San Juan aunque el objetivo que servía de tapadera era "estudiar la anemia en Puerto Rico". En una carta a su amigo F.W. Stewart, confesó haber dado muerte a 8 pacientes.
Este envenenamiento de cobayas humanos indefensos con substancias radiactivas (ver segunda parte) incluyó al líder de la resistencia puertorriqueña Albizu Campos en la década de 1950 cuando se encontraba en la cárcel de La Princesa en el Viejo San Juan, y que murió a causa de ello poco después de salir de prisión. [3]
Luego Rhoads retornó a Estados Unidos donde dirigió el programa de guerra biológica en Maryland, Utah y Panamá. Con la Comisión de Energía Atómica, organizó experimentos de exposición a la radiación con soldados y pacientes de hospitales [4]
Rhoads recomendó en un documento para el Departamento de Defensa la ‘erradicación' de los disidentes portorriqueños mediante el uso ‘juicioso' de bombas de gérmenes[5], es decir de armas biológicas.
El doctor Héctor Pesquera Sevillano recordó también que “El uso de la población como animales de experimentación científica ha sido una constante; miles y miles de mujeres fueron esterilizadas sin su consentimiento”.
Un tema grave que desborda el marco de la experimentación humana para entrar en la política despobladora y eugenésica, al que le he dedicado varios trabajos anteriormente. [7]
Destacó los experimentos con armas químicas y radiactivas efectuados en Puerto Rico por el ejército USA. Como el agente Naranja con alto contenido en dioxinas, luego empleado por las fuerzas armadas estadounidenses contra la población de Vietnam fumigando de paso a miles de soldados norteamericanos y cuyos efectos teratogénicos siguen manifestándose aún hoy. [8]
Los experimentos se realizaron en los montes Toro Negro, en el centro de la Isla, y en El Yunque, en el oriente. “En el caso de la isla de Vieques se experimentó con distintas sustancias, desde el agente Naranja al uranio empobrecido y radiaciones nucleares”.
Vieques de hecho ha sido apodada “la isla del cáncer” por los portorriqueños.[9]
Durante la II Guerra Mundial, médicos investigadores norteamericanos realizaron experimentos con gas mostaza tomando como conejillos de Indias a soldados portorriqueños, afroamericanos y de ascendencia japonesa con la excusa de establecer si la respuesta a los tóxicos era diferente a la de los blancos. Sobre este último particular ya había suficiente con la trágica experiencia práctica de la 1ª guerra mundial.
Se trataba de preparara la invasión de Japón utilizando gases venenosos para un posible plan B. El plan A era el ‘Proyecto Manhattan' es decir la fabricación de las 2 bombas atómicas que perpetraron el holocausto de Hiroshima y Nagasaki. Un crimen contra la humanidad absolutamente innecesario para ganar la guerra puesto que Japón prácticamente ya se había rendido sin condiciones.
La isla de San José, en Panamá, fue uno de los lugares donde se realizaron estos ensayos. El Regimiento de Infantería 295, compuesto por soldados portorriqueños fue rociado deliberadamente con gas mostaza mientras realizaba maniobras en las selvas de ese país.[10]
Las constantes de este y otros experimentos en humanos:
El caso de los experimentos revelados recientemente en Guatemala NO es excepcional y cumple las condiciones en las que generalmente se desarrollan los experimentos humanos.
Los experimentos se realizan preferentemente en países extranjeros no “pobres”, como suelen calificarse, sino empobrecidos
En el caso de Guatemala se realizaron en uno de los países del “patio trasero” de Estados Unidos.
Durante el periodo de 1898 a 1934 Guatemala fue invadida por los Estados Unidos como muchos otros países americanos: Haití (2 veces, al igual que Panamá), Cuba (4 veces, al igual que Colombia y la República Dominicana), Nicaragua (5 veces, al igual que Méjico), y Honduras que se llevó la palma con 7 invasiones[11].
Una vez masacrada la población que tuvo la indecencia de resistirse, los países fueron convertidos en “repúblicas bananeras” que eran prácticamente propiedad de las corporaciones USA como la United Fruit Company.
En Guatemala Estados Unidos instaló y brindó apoyo sin restricciones a gobiernos de ultraderecha responsables de la muerte o desaparición de 250.000 personas solo en el periodo 1960-1996.[12]
El caso actual revela que en Guatemala se infectó intencionalmente con sífilis, gonorrea y otras enfermedades venéreas a unas 600 - 1500 personas (según las fuentes).
Recuerda que la sífilis es una enfermedad grave que puede producir complicaciones cardíacas, enfermedades mentales y muerte.
¿Por qué te escandalizas?, no es nada nuevo.
Antes de los mediatizados experimentos en humanos realizados por los nazis, médicos occidentales ya los habían realizado sobre la fiebre amarilla en poblaciones africanas. Yersin dirigió experimentos sobre el tifus en poblaciones de Indochina y Rusia. Otero en México, Sergent en Argelia, Hamdi en Turquía y Sparrow en Polonia dirigieron el mismo tipo de experimentos.[13]
Por ejemplo, en 1905 Strong utilizaba para sus experimentos sobre el beriberi y la peste a 900 personas que eran, al mismo tiempo, filipinos, voluntarios y condenados a muerte. No deja de ser sorprendente que en una ciudad tan pequeña como Manila en aquella época se pudiesen encontrar 900 filipinos condenados a muerte, y que además todos fueran “voluntarios”.[14]
Las multinacionales siguen haciendo experimentos sobre la población de los países empobrecidos.
Según un informe del United States Department of Health and Human Services el 80% de los fármacos aprobados en 2008 estaban basados parcialmente en estudios realizados fuera de EEUU.[15]
Por ejemplo en Nigeria:
Pfizer ha realizado experimentaciones de drogas antibióticas sobre niños nigerianos sin el conocimiento de los pacientes con la cobertura de los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos. La multinacional ha sido acusada de violar el Código de Nuremberg por los padres de los niños que murieron o quedaron inválidos gracias al tratamiento. [16]
Peor aún, en el 2004 se demostró que la campaña de vacunación anti-polio de la OMS en Nigeria utilizaba vacunas contaminadas con substancias anti fertilidad.[17]
Lo documentó el Dr. Haruna Kaita, que hizo los tests en la Facultad de Farmacia
Ahmadu Bello University Zaria de India, diciendo: “nuestros tests son concluyentes, estamos seguros de los resultados... hemos dado copias del informe a los organismos internacionales NAFDAC, WHO, UNICEF, USAID pero siguen manteniéndolo en secreto”[18].
Tampoco esto es nuevo. En muchos países del tercer mundo se han experimentado vacunas con sustancias toxicas y anticonceptivas sobre su población [19]. Fue demostrada en el pasado en Filipinas mediante análisis de las vacunas del tétanos, y también en otros países de Sudamérica como ya denuncié repetidamente desde los años 90[20].
Aunque hay excepciones a esta regla de realizar los experimentos en países empobrecidos.
Por ejemplo el estudio clínico desarrollado entre 1932 y 1972 por los servicios públicos de salud estadounidenses sobre población norteamericana. Este otro caso histórico de cobayismo tuvo lugar concretamente en Tuskegee, Alabama. Consistió en lo contrario que el experimento de Guatemala, aquí se dejó que la infección de sífilis de unos 600 estadounidenses evolucionase hasta la muerte sin darles tratamiento alguno para estudiarla. Solo sobrevivieron unos 60[21].
Una vez masacrada la población que tuvo la indecencia de resistirse, los países fueron convertidos en “repúblicas bananeras” que eran prácticamente propiedad de las corporaciones USA como la United Fruit Company.
En Guatemala Estados Unidos instaló y brindó apoyo sin restricciones a gobiernos de ultraderecha responsables de la muerte o desaparición de 250.000 personas solo en el periodo 1960-1996.[12]
El caso actual revela que en Guatemala se infectó intencionalmente con sífilis, gonorrea y otras enfermedades venéreas a unas 600 - 1500 personas (según las fuentes).
Recuerda que la sífilis es una enfermedad grave que puede producir complicaciones cardíacas, enfermedades mentales y muerte.
¿Por qué te escandalizas?, no es nada nuevo.
Antes de los mediatizados experimentos en humanos realizados por los nazis, médicos occidentales ya los habían realizado sobre la fiebre amarilla en poblaciones africanas. Yersin dirigió experimentos sobre el tifus en poblaciones de Indochina y Rusia. Otero en México, Sergent en Argelia, Hamdi en Turquía y Sparrow en Polonia dirigieron el mismo tipo de experimentos.[13]
Por ejemplo, en 1905 Strong utilizaba para sus experimentos sobre el beriberi y la peste a 900 personas que eran, al mismo tiempo, filipinos, voluntarios y condenados a muerte. No deja de ser sorprendente que en una ciudad tan pequeña como Manila en aquella época se pudiesen encontrar 900 filipinos condenados a muerte, y que además todos fueran “voluntarios”.[14]
Las multinacionales siguen haciendo experimentos sobre la población de los países empobrecidos.
Según un informe del United States Department of Health and Human Services el 80% de los fármacos aprobados en 2008 estaban basados parcialmente en estudios realizados fuera de EEUU.[15]
Por ejemplo en Nigeria:
Pfizer ha realizado experimentaciones de drogas antibióticas sobre niños nigerianos sin el conocimiento de los pacientes con la cobertura de los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos. La multinacional ha sido acusada de violar el Código de Nuremberg por los padres de los niños que murieron o quedaron inválidos gracias al tratamiento. [16]
Peor aún, en el 2004 se demostró que la campaña de vacunación anti-polio de la OMS en Nigeria utilizaba vacunas contaminadas con substancias anti fertilidad.[17]
Lo documentó el Dr. Haruna Kaita, que hizo los tests en la Facultad de Farmacia
Ahmadu Bello University Zaria de India, diciendo: “nuestros tests son concluyentes, estamos seguros de los resultados... hemos dado copias del informe a los organismos internacionales NAFDAC, WHO, UNICEF, USAID pero siguen manteniéndolo en secreto”[18].
Tampoco esto es nuevo. En muchos países del tercer mundo se han experimentado vacunas con sustancias toxicas y anticonceptivas sobre su población [19]. Fue demostrada en el pasado en Filipinas mediante análisis de las vacunas del tétanos, y también en otros países de Sudamérica como ya denuncié repetidamente desde los años 90[20].
Aunque hay excepciones a esta regla de realizar los experimentos en países empobrecidos.
Por ejemplo el estudio clínico desarrollado entre 1932 y 1972 por los servicios públicos de salud estadounidenses sobre población norteamericana. Este otro caso histórico de cobayismo tuvo lugar concretamente en Tuskegee, Alabama. Consistió en lo contrario que el experimento de Guatemala, aquí se dejó que la infección de sífilis de unos 600 estadounidenses evolucionase hasta la muerte sin darles tratamiento alguno para estudiarla. Solo sobrevivieron unos 60[21].
Los experimentos siempre son dirigidos y realizados por una o varias instituciones y organismos médicos “respetables”
En Guatemala y Tuskegee se llevaron a cabo por los Servicios Públicos de Salud de Estados Unidos (Public Health Service). Hay auténticos especialistas en este tipo de experimentos. Por ejemplo, el Dr. John Cutler, responsable del proyecto de Guatemala, participó también en los estudios de Tuskegee y murió en el año 2003 sin haber pagado sus crímenes
El Dr. Cornelius Rhoads, trabajaba para el Instituto Rockefeller de Investigaciones Médicas. Sus experimentos “científicos” consistieron en inyectar células cancerosas, e irradiar a portorriqueños y norteamericanos. Rhoads en lugar de ser condenado a muerte como algunos de los criminales nazis que hacían experimentos similares, fue condecorado con la “Legion of Merit” en 1945 y premiado con un ascenso a Jefe de la División de Armas Biológicas del Ejército [22].
Necesariamente los experimentos siempre se hacen con la complicidad de los organismos sanitarios locales y de gobiernos títeres corruptos. En el caso del que nos ocupa el gobierno de Guatemala estaba entonces dirigido por el presidente Juan José Arévalo Bermejo. Pero también participó el Buró Sanitario Panamericano de Salud (hoy la Organización Panamericana de la Salud, OPS).
Además en el experimento de Tuskegee el Centro de Control de Enfermedades (CDC, Center for Disease Control) colaboró con el crimen junto con la Asociación Médica Nacional (National Medical Association) y la Asociación Médica Americana (American Medical Association) consiguiendo que se prolongara hasta la muerte, a pesar de que la penicilina ya se aplicaba y era demostradamente eficaz en la sífilis (ver mas adelante) como algunos funcionarios recordaron.
En el caso de las esterilizaciones incluidas en los programas de vacunas no solo era necesaria la colaboración de los gobiernos corruptos sino también la de los laboratorios farmacéuticos y de la OMS.[23]
Los experimentos humanos son habitualmente dirigidos por médicos que trabajan para el gobierno norteamericano en prestigiosas instituciones estatales que gozan de la confianza pública y son financiadas con el dinero de los contribuyentes ignorantes de para qué se utiliza.
Los experimentos humanos se realizan prácticamente siempre en una población no blanca; negros, latinos, indios, etc.
En el caso del experimento de Guatemala eran latinos y en el de Tuskegee, Alabama, los infectados con la sífilis eran aparceros negros estadounidenses
A comienzos del siglo XX el caso de la pelagra es muy significativo en Estados Unidos. Incontables individuos murieron de pelagra o de los tratamientos tóxicos que se experimentaban con ellos. Durante unas dos décadas el Servicio de Salud Pública de EE.UU., que luego sería denominado Institutos Nacionales de la Salud (NIH), mantuvo que la pelagra era una enfermedad infecciosa de transmisión sexual. Finalmente el director de la agencia admitió en 1935 que sabían desde 1910 (Goldberg) que la pelagra no era infecciosa, que está causada por una insuficiencia vitamínica del grupo B, concretamente de niacina, pero que no actuaron debido a que las muertes se producían en poblaciones de raza negra pobres.[25]
En 1990 se les dio una vacuna “experimental” del sarampión que nunca había sido autorizada para ser usada en Estados Unidos a más de 1500 bebés negros e hispanos de seis meses de edad en Los Ángeles. Los CDC admitieron mas tarde que los padres nunca fueron informados de que la vacuna que fue inyectada a sus niños era experimental.[26]
Hicieron falta varios muertos para que se destapase el escándalo de que niños hispanos y negros huérfanos habían sido tratados como cobayas en el centro médico de la Universidad de Columbia administrándoles drogas peligrosas supuestamente destinadas al SIDA desde 1997. En algunos casos los niños fueron obligados mediante sondas implantadas en sus estómagos a tomar las drogas. En otros casos los padres o tutores que se negaron a darles el tratamiento perdieron la tutela de sus hijos. Los laboratorios Glaxo Smith Kline, Pfizer y Biocene que financiaban los experimentos tuvieron, como es habitual, la complicidad de los Institutos Nacionales de la salud USA. [27]
Lo mismo había sucedido en Inglaterra en el caso del veneno AZT para el SIDA que fue experimentado en niños negros pobres como lo denunció el parlamentario Británico George Galloway en su día. [28]
El laboratorio norteamericano Upjohn hizo los experimentos del anticonceptivo inyectable tóxico Depoprovera con mujeres del tercer mundo y con mujeres pobres en los Estados Unidos utilizadas como cobayas[29], antes incluso de que la droga fuera probada en animales[30].
Con la píldora anticonceptiva sucedió lo mismo. Fue experimentada por el laboratorio norteamericano Searle (luego absorbido por Monsanto) en un centenar de portorriqueñas pobres y a las que murieron ni siquiera se les hizo la autopsia[31].
Idéntica situación nos encontramos con los experimentos de psiconeurocirujía. El Dr. Peter Breggin ha denunciado que los cobayas de elección eran pacientes psiquiátricos, pobres, negros y mujeres.[32]
Los experimentos se realizan preferentemente sobre poblaciones indefensas
En el caso del experimento de Tuskegee, Alabama EEUU, los infectados con la sífilis eran aparceros negros, que en su mayoría eran analfabetos, lo que les situaba en una clara situación de indefensión.
En Guatemala los cobayas incluían a presos a los que se les hizo tener relaciones sexuales con prostitutas enfermas de sífilis o gonorrea y a enfermos mentales, a los que se les se inoculó directamente la enfermedad.
Susan Reverby profesora de historia de la medicina en el Wellesley College, reconoció en una reciente entrevista que hubo un estudio de la inoculación de sífilis después del de Guatemala, publicado en 1954, que se llevó a cabo sobre los presos de la cárcel de Sing Sing en Nueva York en 1954.[33]
La utilización de presos en Estados Unidos ha sido muy frecuente para experimentos humanos. Un alto responsable de la industria farmacéutica ha afirmado que:
“Si las prisiones cerrasen sus puertas, los laboratorios estarían listos”.[34]
En 1960 se estimaba que 20.000 presos en Estados Unidos participaban en experimentos médicos, cifra que subió a 25.000 en 1967.[35]
Así por ejemplo en 1915 Goldberger produjo la pelagra en prisioneros de Mississipi para probar su tratamiento. [36] Y lo mismo se hizo con el paludismo en prisiones de Chicago, Nueva Jersey en 1944[37]. En la prisión federal de Atlanta, en las prisiones del estado de Illinois, y en los correccionales de Nueva Jersey cientos de presos eran infectados con el paludismo. Cada año había más de 1000 experimentos de este tipo[38].
Curiosamente esta epidemia de experimentos coincidía en el tiempo con los de los médicos nazis que hacían lo mismo con los prisioneros de los campos de concentración.
Esto ha llevado a que algunos industriales hayan establecido instalaciones hospitalarias permanentes dentro de las prisiones USA. Como por ejemplo la multinacional Parke Davis que creó un verdadero hospital con 40 camas y 3 médicos en la prisión de Michigan Jackson-State asegurándose la explotación exclusiva de los presos.[39]
Pero no han sido solo los norteamericanos los que practicaron esto en presos. Tras la orden del gobierno francés de realizar experimentación humana, Gruneberger administró la peste a 12 prisioneros, de los que ninguno sobrevivió, Adler infectó a 5 cancerosos con kalahazar, todos murieron. [40]
Otro sector desprotegido son los enfermos mentales que fueron también utilizados en el caso de la experimentación de Guatemala.
Hay una impresionante colección de atrocidades médicas practicada sobre los llamados enfermos mentales. Ensayos de vacunaciones y medicamentos tóxicos, cirugías innecesarias, punciones directas en el cráneo, biopsias hepáticas repetidas, inyecciones de substancias radiactivas en niños[41] e incluso utilización como bancos de órganos vivientes. [42]
Y peor aún: los niños. Por ejemplo a 73 niños indefensos de una escuela de Massachusetts se les hizo ingerir isótopos radiactivos en la avena del desayuno en la década de los 40.[43]
El año pasado recordaba en un boletín que entre finales de los años 40 y los 60, unos 200.000 niños judíos emigrados desde el norte de África (judíos Mizrahim) fueron irradiados por el gobierno de Israel con fuertes dosis de radiaciones ionizantes muy superiores a las máximas admisibles. [44]
Los sujetos de los experimentos están desinformados y son engañados
Los sujetos del experimento en Guatemala fueron convertidos en cobayas sin que tuvieran conocimiento de que estaban siendo utilizados como conejillos de indias.
Los negros utilizados en el experimento Tuskegee tampoco dieron su consentimiento informado no solo porque la mayoría eran analfabetos, sino porque no fueron informados de su diagnóstico, y fueron engañados al decirles que tenían "mala sangre".
Se les engatusó diciéndoles que podrían recibir transporte gratuito a la clínica, comidas calientes los días de examen, tratamiento gratuito para enfermedades leves. Incluso se les prometió un seguro que cubría los gastos del entierro en caso de fallecimiento si participaban en el estudio pero con la condición para recibirlo de que debían someterse a autopsia tras la muerte.
Además también los engañaron en medio del estudio para que se hicieran punciones lumbares, un procedimientote de alto riesgo que puede originar una meningitis y es mortal en algunas ocasiones, además de no tener ninguna utilidad terapéutica. Los matasanos mandaron a todos los pacientes una engañosa carta titulada “Última oportunidad para un tratamiento especial y gratuito” (Last Chance for Special Free Treatment) para que fueran a dejarse pinchar la médula y presentaron el examen como un "tratamiento".
También volvieron a ser engañados cuando 250 hombres del experimento fueron llamados a filas durante la segunda guerra mundial. Fueron diagnosticados de sífilis y avisados de que requerían tratamiento con penicilina que ya era el tratamiento normal y eficaz. Sin embargo el representante del Servicio de Salud Pública de la época reconoció: "Por el momento, estamos impidiendo que los pacientes positivos de sífilis reciban tratamiento".
Los responsables siempre tienen excusas para justificar su comportamiento criminal
Según la ley de hierro exculpatoria de los que practican crímenes contra la humanidad:
“Para hacer bien el mal, primero hay que convertirlo en bien”.
Evidentemente esta ley los protege psicológicamente en primer lugar de si mismos y en segundo lugar los protege socialmente porque actúan "en beneficio de la humanidad". Justamente este fue uno de los argumentos de los experimentadores nazis en el juicio de Nuremberg. Solo que ellos habían perdido la guerra y algunos fueron condenados. No todos, otros fueron reutilizados por los servicios secretos occidentales para aprovechar su “experiencia” por ejemplo en el proyecto Paperclip. (Ver segunda parte).
En Guatemala la excusa era probar si la penicilina era eficaz para combatir la sífilis y la gonorrea, por lo que muchos no fueron tratados para compararlos con los que sí lo fueron. Hasta la fecha los responsables pretenden no saber exactamente cuántos de los infectados recibieron tratamiento, ni cuántos de ellos murieron. Pero los experimentos "nunca produjeron ninguna información útil", según Susan Reverby, catedrática en el Wellesley College. De hecho eran innecesarios ya que la penicilina que se utilizó directamente sobre los enfermos de sífilis en todo el mundo los curaba desde 1945 mientras que los experimentos fueron realizados entre 1946 y 1948 en Guatemala
A veces las coartadas claman al cielo como en el caso de los negros del experimento de Alabama que fueron estudiados para observar la progresión natural de la sífilis si no era tratada, se les daban placebos, lo cual es difícilmente justificable en nombre de la ciencia.
Máxime cuando al menos desde 1928 ya había un estudio realizado en Oslo que había informado de las manifestaciones patológicas de la sífilis no tratada en varios cientos de hombres blancos. Este no era un estudio experimental, sino retrospectivo, donde los investigadores habían recopilado información de pacientes que estaban ya contagiados y habían permanecido cierto tiempo sin tratamiento. Por lo tanto las consecuencias nefastas de la enfermedad se conocían.
Los experimentos sobre la sífilis no tratada fueron realizados entre 1932 y 1972 en Alabama a pesar de que desde 1945 se sabía que la penicilina era eficaz contra la sífilis y en 1947 se había convertido en el tratamiento de elección para la sífilis que curaba. Ese mismo año se formuló el Código de Nuremberg (Nuremberg Code), para proteger los derechos de los sujetos sometidos a ensayos clínicos.
Sin embargo no por ello se trató a los sujetos del estudio con penicilina, ni se dio por finalizado el criminal experimento. Los matasanos del experimento Tuskegee ocultaron la información sobre la eficacia de la penicilina para continuar estudiando cómo la enfermedad se diseminaba y acababa provocando la muerte.
Incluso advirtieron a los sujetos cobayas que evitaran el tratamiento con penicilina, que ya estaba siendo utilizada con otros enfermos del lugar con éxito.
El Dr. Cutler, que participó en el experimento de Guatemala y en de Alabama, en un documental de PBS “NOVA” de 1993 llamado “Engaño mortal” afirmó cínicamente: “Era importante que no se los tratara, y no habría sido deseable seguir adelante y administrarles grandes dosis de penicilina para tratar la enfermedad ya que esto habría interferido con el estudio”.[45]
El estudio continuó hasta 1972 cuando ya no se pudo seguir ocultando el escándalo y se hizo público. Pero ya 399 participantes habían muerto, al menos 28 de sífilis y otros 100 de complicaciones médicas relacionadas. Además, 40 mujeres de los sujetos resultaron infectadas y 19 niños nacieron con sífilis congénita es decir contrajeron la enfermedad al nacer. Solo quedaban 74 sujetos aún vivos.
No siempre se trata de buscar remedios o de probar nuevos medicamentos, en ocasiones es pura experimentomanía. Un ejemplo es relatado por Hodges en la penitenciaría de Iowa donde se les provocó el escorbuto con una dieta sin vitamina C y un producto administrado por sonda gástrica. Los presos fueron observados durante 96 días incluso cuando aparecieron dolores articulares, púrpuras, astenia, disnea, alteraciones en la marcha y en el comportamiento.
Puedes preguntarte para que se hizo este experimento cuando todo el mundo sabe desde hace siglos que el escorbuto es causado por el déficit de vitamina C y se trata sencillamente dando verdura u fruta frescas. Al final el estúpido responsable de este experimento dio su genial conclusión “una vez más nuestras observaciones están de acuerdo con las del British Médical Council”. [46]
Transcurren décadas antes de que las atrocidades se den a conocer
Se dice que el experimento de Guatemala “se descubrió” cuando la profesora estadounidense Susan Reverby[48], catedrática de historia médica en el Wellesley College, encontró archivos antiguos del difunto doctor John Cutler, cuyos resultados aparentemente nunca fueron publicados, mientras llevaba a cabo una indagación sobre el Estudio Tuskegge, sobre el que publicó un libro[48].
Parece que la profesora Reverby primero se encontró con los archivos el año pasado y ofreció un discurso sobre los contenidos en un congreso de historiadores de medicina en mayo 2010, donde un funcionario de salud del gobierno federal la escuchó.[50] Su artículo se publicará el año próximo en el Journal of Policy History pero existe una copia previa disponible.[51]
El caso de la sífilis transmitida a los afro estadounidenses en el experimento de Alabama se divulgó en 1972, pero está demostrado que se conocía mucho antes.
Así que es bastante improbable que nadie se hubiese dado cuenta de que había un experimento similar en Guatemala antes de 2009 ya que era el mismo Servicio Público de Salud de Estados Unidos el que dirigió ambos estudios y también al menos un de los médicos que lo dirigían era el mismo.
Además ya había habido oposición al estudio dentro del propio cuerpo médico. En 1966, Peter Buxtun, investigador de enfermedades venéreas de los Servicios Públicos de Salud de Estados Unidos en San Francisco, envió una carta al jefe de la sección de venéreas cuestionando la ética del estudio.
Pero el poderoso Centro de Control de Enfermedades (CDC, Center for Disease Control) reafirmó la necesidad de completar el estudio ¡hasta que todos los pacientes hubieran muerto para realizar las autopsias!. Esta actitud descaradamente criminal del CDC fue apoyada por las delegaciones locales de la Asociación Médica Nacional (National Medical Association) y la Asociación Médica Americana (American Medical Association), lo que las convierte en cómplices.
En 1968, William 'Bill' Carter Jenkins, estadístico negro de los Servicios Públicos de Salud, que trabajaba en el Departamento de Salud, Educación y Asistencia Social (Department of Health, Education and Welfare), fundó y editó Drum, una revista dedicada a acabar con la discriminación en su departamento, y pidió el fin del experimento Tuskegee, pero no se le hizo caso.
En 1979 se publicó el Informe Belmont (Belton Report) que era crítico con el experimento.
El Dr. Buxtun, que había escrito 6 años antes a sus superiores cuestionando la ética del experimento, finalmente se hartó y dio la información a la prensa a principios de los setenta. La noticia apareció por primera vez en el Washington Star el 25 de julio de 1972. El experimento Tuskegee, se conoció públicamente y el mismo año se detuvo. Posteriormente numerosas obras han hecho referencia a este experimento, entre ellas el musical Thing-Fish de Frank Zappa está basado en parte en los hechos.
Igual que en el caso de los negros de Alabama, la utilización de soldados de color portorriqueños, afroamericanos, y americanos de origen japonés, como cobayas de experimentos con gas mostaza durante la segunda guerra mundial se conoció por las investigaciones de la profesora canadiense, también especializada en historia de la medicina, Susan L. Smith, que revisó los registros del ‘U.S. Chemical Warfare Service' y del ‘Defense Research and Development' de Canadá y los testimonios; que se conservan en los archivos de la ‘National Academy of Sciences' en Washington, de 250 veteranos. Pero igual que en el caso de Guatemala y de Alabama hubo que esperar varias décadas para que los hechos fueran publicados a septiembre de 2008.[52]
Las autoridades responsables presentan disculpas décadas después, cuando la mayoría de los cobayas humanos han muerto.
En el caso de Guatemala las disculpas fueron presentadas por el presidente estadounidense Barack Obama, Hillary Clinton secretaria de estado y por Kathleen Sebelius[53].
Sebelius precisamente es la titular del Departamento de Salud y Servicios Sociales del gobierno USA. Es decir del mismo departamento que como secretaría del Servicio de Salud Pública, realizó el experimento.
Lo mismo sucedió en el caso del experimento Tuskegee sobre los negros de Alabama. Pero hubo que esperar al 16 de mayo de 1997 para que el presidente Bill Clinton pidiese disculpas formalmente a los participantes igual que ahora.
Se tranquiliza a la gente diciendo que los expertos investigan el caso
El jefe de Estado guatemalteco, Álvaro Colom, comentó que en una conversación telefónica el viernes pasado con el presidente de EE.UU. Barack Obama acordaron conformar una comisión bilateral integrada por científicos de las dos naciones para analizar los hechos.
Kathleen Sebelius aseguró que “estamos iniciando una minuciosa investigación con respecto a los detalles de este caso”.
Esto sugiere que no estaban al corriente, ya que evidentemente no se investiga algo que se conoce. Esto es absolutamente impresentable ya que los experimentos fueron realizados por organismos oficiales estadounidenses y de Guatemala.
En Guatemala los experimentos estaban dirigidos por el oficial médico del Servicio Público de Salud USA John Cutler que al parecer también participó en el Estudio Tuskegge.[54]
El experimento de Guatemala estaba patrocinado y financiado por el Servicio Público de Salud de Estados Unidos.
Recuerda que los Institutos Nacionales de Salud (NIH) tenían su origen en los servicios de salud de la marina. De ellos salió en 1940 el Centro de las enfermedades transmisibles que se convertiría en el Centro de Control de Enfermedades (CDC) que como has visto colaboró activamente en el crimen. El CDC a su vez daría a luz en 1951 al infame Servicio de Inteligencia de epidemias, EIS “La CIA médica”.
Los políticos - actores de turno tranquilizan a la población con sus lágrimas de cocodrilo y diciendo que esto ya no pasa.
Pero mienten.
Estas actividades no han desaparecido y el complejo médico industrial sigue utilizándolas.
Los casos de Guatemala y Alabama que han saltado a los medios no son los mas graves porque en ocasiones lo que se investiga no son tratamientos, ni siquiera enfermedades sino armas.
Por ejemplo desde la década de los 40 matasanos del ejército USA envenenaron con elementos radiactivos (incluyendo inyecciones de plutonio) a ciudadanos norteamericanos entre los que había incluso mujeres embarazadas y niños. [55] [56]
Como demostraremos en la segunda parte de este trabajo todos estos experimentos siguen haciéndose hasta hoy.
Pero mienten.
Estas actividades no han desaparecido y el complejo médico industrial sigue utilizándolas.
Los casos de Guatemala y Alabama que han saltado a los medios no son los mas graves porque en ocasiones lo que se investiga no son tratamientos, ni siquiera enfermedades sino armas.
Por ejemplo desde la década de los 40 matasanos del ejército USA envenenaron con elementos radiactivos (incluyendo inyecciones de plutonio) a ciudadanos norteamericanos entre los que había incluso mujeres embarazadas y niños. [55] [56]
Como demostraremos en la segunda parte de este trabajo todos estos experimentos siguen haciéndose hasta hoy.
¿Por qué justamente ahora se revela el experimento de Guatemala?
Este mea culpa de EEUU coincide con la creciente desconfianza de la población en las directrices sanitarias tras el evidente fraude de la gripe del cerdo. Reconocer errores pasados y hacer votos piadosos siempre viene bien para consolidar la parodia de democracia sanitaria.
Este reconocimiento también sigue con menos de un mes de diferencia al lanzamiento de la iniciativa mundial de Estados Unidos en materia de salud (Global Health Initiative – GHI) el 16 de agosto de 2010. Una campaña que también tiene como objetivo mejorar su imagen en el exterior y ahorrar en salud una pequeña parte de lo que se gastan matando a la gente en sus guerras. Ya no habrá contribuciones destinadas a la lucha contra tal o más cual enfermedad, serán reemplazadas por ayudas a favor de los sistemas de salud, previsiblemente aquellos países que cumplan las directrices de las multinacionales de las que Estados Unidos es el perrito guardián. Washington tiene previsto limitar así su apoyo a un grupo de 20 países, previsiblemente los que "se porten bien".[57]
Curiosamente, en julio pasado, Guatemala se sumó a la Iniciativa para la Eliminación de la Transmisión Materno-infantil del VIH y de la Sífilis Congénita, bajo los auspicios de la OPS, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), entre otras organizaciones[58].
Esta propaganda servirá para potenciar la campaña, lo cual aparentemente está muy bien para la sífilis, pero será un desastre en el caso del VIH pues servirá para extender el fraude de que el SIDA es una enfermedad infecciosa de transmisión sexual ocultando sus causas que en el tercer mundo son fundamentalmente la desnutrición y la pobreza crecientes.
Recuerda que la hipótesis oficial que es contestada por cientos de científicos con las más altas calificaciones en virología, biología molecular, inmunología y epidemiología e incluso por 4 premios Nobel, desde hace 26 años.
Lo mismo sucedió en el caso del experimento Tuskegee que fue reconocido públicamente en los 90 durante la administración Clinton que junto con su vicepresidente Al Gore desarrollaron en esos años una importante cruzada de promoción de la hipótesis oficial del SIDA. [59]
Recuerda que Al Gore llegó a hacer de mercachifle de las multinacionales para vender rebajado el veneno AZT que produce SIDA a los negros de Sudáfrica. Cuando el presiente sudafricano declaró públicamente su cuestionamiento del fraude de la teoría oficial, hicieron que por primera vez en la historia se reuniese el Consejo de Seguridad de la ONU para tratar el tema del SIDA en África y Clinton amenazó directamente diciendo que el Sida en África era una cuestión de seguridad nacional enviándole nada menos que al General Colin Powell. [60]
No olvides tampoco que el lanzamiento de su campaña propagandística planetaria contra el SIDA coincidió con su lanzamiento de bombas sobre las poblaciones de Yugoslavia, Iraq y Afganistán, sin olvidar su glorioso bombardeo de la única fábrica de medicamentos que poseía Sudán.
Clinton ha seguido su cruzada contra el SIDA incansablemente y estuvo en el congreso oficial de Barcelona en 1992[61], mientras que Al Gore se ha convertido en el apóstol de la calentología con la que distrae a la gente de los problemas mas importantes que nos amenazan. [62]
Pero no te inquietes… todo esto tal vez solo son coincidencias casuales.
Si consideras que esta contrainformación debe estar a disposición de todos difúndela reenviándola a tu lista de correos
Referencias:
o [1] Al descubierto: médicos estadounidenses infectaron de sífilis a cientos de guatemaltecos en la década de 1940 sin su consentimiento. http://www.democracynow.org/appearances/susan_reverby
[2] Afirman que Puerto Rico también ha sido conejillo de indias de EU. Inter News Service . domingo, 3 de octubre de 2010. http://elpolvorin.over-blog.es/article-eeuu-y-su-costumbre-de-usar-al-resto-del-mundo-como-conejillo-de-indias-58289563.html
[3] THE PUERTO RICAN CANCER EXPERIMENT. http://borinquen-llora.blogspot.com/p/puerto-rican-cancer-experiment.html
[4] Ernesto Carmona. Armas químicas y bacteriológicas. Estados Unidos experimentó en secreto con su propia gente. 1ro de mayo de 2004. http://www.voltairenet.org/article121114.html
[5] Germ War: The U.S. Record. Counter Punch, 1998.
[6] http://PuertoRicoentresiglos.wordpress.com/tag/antonio-r-barcelo/
[7] A. Embid. Del control de la natalidad al eugenismo. 1ª Parte (PDF) Revista 59
http://www.amcmh.org/PagAMC/medicina/articulospdf/59ControlNatalidad.pdf
A. Embid. Del control de la natalidad al eugenismo. 2ª Parte (PDF) Revista 60
http://www.amcmh.org/PagAMC/medicina/articulospdf/60ControlNatalidad.pdf
A. Embid. Del control de la natalidad al eugenismo. 3ª Parte (PDF) Revista 61
Disponibles en la sección de artículos gratuitos de nuestra web. www.amc.org
[8] Boletin 318. Vietnam: El agente naranja sigue matando. Entrevista con André Bouny. Silvia Cattori. 2 Septiembre 2010 http://www.ciaramc.org/ciar/boletines/cr_bol318.htm
[9] Boletín nº314. Más de la mitad de la gente de Viequez (Puerto Rico) sigue muriendo de cáncer. Alfredo Embid.
http://ciaramc.org/ciar/boletines/cr_bol314.htm
[10] Susan L. Smith: "Mustard Gas and American Race-Based Human Experimentation in World War II". The Journal of Law, Medicine & Ethics, Vol. 36, Issue 3, pp 517-521, Sept. 2008.
[11] Joel Andreas. Addicted to war. AK press Canadá. 2003 ISBN 1 902593 57 X www.addictedtowar.com
[12] Salvador Capote. EEUU: experimentan con seres humanos. Nuestra alma esta enferma de tanta hipocresía.http://red-latina-sin-fronteras.lacoctelera.net/post/2010/10/05/eeuu-experimentan-con-seres-humanos
[13] Dr. Mazouki. La experimentación en el hombre, la otra cara de la medicina. Traducción de Alfredo Embid. Ediciones Júcar Madrid. 1979. pgna 69.
[14] Dr. Mazouki. La experimentación en el hombre, la otra cara de la medicina. Traducción de Alfredo Embid. Ediciones Júcar Madrid. 1979.
[15] Arthur Caplan, Ph.D. Horrific medical tests of past raise concerns for today. As more research moves outside U.S., are we still exploiting the poor?. http://www.msnbc.msn.com/id/39463624/ns/health-health_care/
[16] The Nation. La multinacional Pfizer ha realizado experimentaciones sobre niños del tercer mundo que violan el Código de Nuremberg. Revista Medicina Holística nº70 2003
[17] http://news.bbc.co.uk/1/hi/world/africa/3342159.stm.3
[18] http://www.newmediaexplorer.org/sepp/2004/01/25/polio_vaccine_voodoo_ intriguing_questions.htm
[19] Breves 77: Se utilizan en Nigeria vacunas que contienen productos contra la fertilidad.
[20] Alfredo Embid Del control de la natalidad al eugenismo. Revista 59
[21] El experimento Tuskegee: La más infame investigación biomédica de la historia de los EEUU
http://1977voltios.blogspot.com/2010/03/el-experimento-tuskegee-la-mas-infame.html
[22] Germ War: The U.S. Record. Counter Punch, 1998.
[23] A. Embid. Del control de la natalidad al eugenismo. 1ª Parte (PDF) Revista 59
http://www.amcmh.org/PagAMC/medicina/articulospdf/59ControlNatalidad.pdf
[24] http://www.wellesley.edu/PublicAffairs/Releases/2009/reverby_examining.jpg
[25] Bryan Ellison.”Why we will never win the war on aids” Inside story comunications el cerrito Ca. USA.1994.
[26] Lilia Cisneros Medicina Globalizada http://comitecanadien.netfirms.com/HUMANIDAD2000/CISNEROS/medicina.htm
[27] Alfredo Embid. “Niños hispanos y negros huérfanos tratados como cobayas”. Revista Medicina Holística nº72. 2004 pgna 349.
[28] Ver video de Meditel sobre el AZT editado por la AMC en DVD.
[29] Committee on Women, Population, and the Environment Hoja Informativa Sobre Depo-Provera. Published: enero 6, 2007 http://www.cwpe.org/node/186
[30] http://clnet.ucla.edu/women/nlho/news/depo.htm
[31] Alfredo Embid Lo que no le han contado sobre la anticoncepción (PDF) Revista 59
[32] Maya Pines. Los manipuladores de cerebro. Alianza editorial. Madrid. 1973.
[33] La oscura historia de la experimentación médica, desde los nazis hasta Tuskegee pasando por Puerto Rico
http://www.democracynow.org/2010/10/5/the_dark_history_of_medical_experimentation
[34] “Experimentation behind bars” Atlantic. Enero 1973
[35] R.C. Fox citado en Dr. Mazouki. La experimentación en el hombre, la otra cara de la medicina. Traducción de Alfredo Embid. Ediciones Júcar Madrid. 1979. pgna 110- 111
[36] Goldberg citado en M.H. Pappwoth “Human guinea pigs” Routledge and Keegan Paul, Londres 1967.
[37] Dr. Mazouki. La experimentación en el hombre, la otra cara de la medicina. Traducción de Alfredo Embid. Ediciones Júcar Madrid. 1979. pgna 110.
[38] Citado en Life 4 junio 1945.
[39] Dr. Mazouki. La experimentación en el hombre, la otra cara de la medicina. Traducción de Alfredo Embid. Ediciones Júcar Madrid. 1979. pgna 113.
[40] François Bayle. “Croix gamee et caducée” Neustadt. 1950.
[41] Dr. Mazouki. La experimentación en el hombre, la otra cara de la medicina. Traducción de Alfredo Embid. Ediciones Júcar Madrid. 1979. pgnas 145 y siguientes.
[42] Chomsky Noam. Granjas humanas Revista Medicina Holística nº 69 pag 187
[43] Ernesto Carmona. Armas químicas y bacteriológicas. Estados Unidos experimentó en secreto con su propia gente. 1ro de mayo de 2004. http://www.voltairenet.org/article121114.html
[44]- Boletín nº 231. El gobierno es racista hasta con los propios judíos. El gobierno convirtió en cobayas humanas a muchos niños judíos sometiéndoles a fuertes dosis de radiación. Alfredo Embid.
http://ciaramc.org/ciar/boletines/cr_bol231.htm
[45] Amy Goodman.De Tuskegee a Guatemala pasando por Nuremberg. Democracy Now
versión española traducido por Fernanda Gerpe.http://www.democracynow.org/es/blog/2010/10/7/de_tuskegee_a_guatemala_pasando_por_nuremberg
[46] Hodges citado por Dr. Mazouki. La experimentación en el hombre, la otra cara de la medicina. Traducción de Alfredo Embid. Ediciones Júcar Madrid. 1979. pgna. 116.
[47]http://t2.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcTysdXuSB7gX9wneDRPC4aBXOfmqBFnVXX9Yed4frrbAmveWOE&t=1&usg=__EHA_Q1CHTAE-ZtcqQZZH0LKJVrw=
[48] Susan M. Reverby . Marion Butler McLean Professor in the History of Ideas and Professor of Women’s and Gender Studies, Wellesley College Wellesley MA 781 283 2535
Contact Information: sreverby@wellesley.edu Telephone: 781.283.2535
http://www.wellesley.edu/WomenSt/fac_reverby.html
[49]- EE.UU. se disculpa con Guatemala por infectar a cientos de personas con venéreas
http://www.voltairenet.org/article167145.html
[50]- El resultado de su investigación, la cual se puede consultar en:www.wellesley.edu/WomenSt/Reverby%20Normal%20Exposure.pdf
[51] “'Normal Exposure' and Inoculation Syphilis: A PHS 'Tuskegee' Doctor in Guatemala, 1946-48" in press with the Journal of Policy History, disponible aquí. Reverby, “’Normal Exposure,’” Synopsis.pdf
http://www.wellesley.edu/WomenSt/Synopsis%20Reverby%20%27Normal%20Exposure%27.pdf
Reverby, “’Normal Exposure,’” Full pre copy-edited article.pdf
“Normal Exposure” and Inoculation Syphilis: A PHS “Tuskegee” Doctor in Guatemala, 1946-48
Journal of Policy History Special Issue on Human Subjects January 2011.
[52] Susan L. Smith: "Mustard Gas and American Race-Based Human Experimentation in World War II". The Journal of Law, Medicine & Ethics, Vol. 36, Issue 3, pp 517-521, Sept. 2008.
[53] Hillary Clinton pide perdón por experimentos médicos en Guatemala.
http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2010/10/101001_guatemala_eeuu_infecciones_sexuales_gz.shtml
[54]David Brooks. EE.UU. infectó con sífilis y gonorrea a 1.500 guatemaltecos. Clarín de Chile.
http://www.elclarin.cl/index.php?option=com_content&task=view&id=22536&Itemid=46
[55] Alfredo Embid. EXPERIMENTACION HUMANA CON RADIACTIVIDAD EN USA.
Revista Medicina Holistica nº37. 1994. Sección de breves.
[56] Alfredo Embid. ESTALLA EL ESCANDALO DE LAS PRUEBAS RADIACTIVAS EN CIUDADANOS NORTEAMERICANOS. Revista Medicina Holistica nº38. 1994. Sección de breves.
[57] - «Smart Power»: Hillary Clinton pone en marcha la GHI
http://www.voltairenet.org/article166885.html
- Discurso de Hillary Clinton: «La Iniciativa de EE. UU. para la salud mundial», 16 de agosto de 2010.
http://www.voltairenet.org/article166783.html
[58]Julie López. Centenares de guatemaltecos fueron contagiados sin su consentimiento para llevar a cabo estudios de laboratorio. Colom califica de "espeluznante" los experimentos de EEUU con sífilis. BBC Mundo.http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2010/10/101001_guatemala_reacciones_eeuu_sifilis_gz.shtml
[59] Boletín140: 3- Cuando Al Gore ejercía su papel de vendedor de drogas al servicio de las multinacionales. Alfredo Embid. http://www.ciaramc.org/ciar/boletines/cr_bol140.htm
[60] África se rebela contra la ortodoxia racista del SIDA
http://www.amcmh.org/PagAMC/sida/articulos/CMbeki.RV059.htm
[61] Alfredo Embid. Breve balance sobre el encuentro para la reevaluación del SIDA en Barcelona y el congreso oficial. Revista de Medicina Holística nº 68. Página 172.
[62] Boletín141: Recuerdo de algunas atrocidades del dúo dinámico Clinton- Gore durante el periodo en el que soportamos su mandato. Alfredo Embid.
http://www.ciaramc.org/ciar/boletines/cr_bol141.htm
TOMADO DE INVESTIGAR 11S
No hay comentarios:
Publicar un comentario