Los techos de una Escuela ceden. La estructura donde se educan cientos de niños (y entre ellos mi propio hijo) se derrumba. Nunca una imagen tan dura, pudo ilustrar mejor lo que pareciera ser el interés de los funcionarios del Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires en la Educación Pública. Ocurrió ayer 17/11/2010 por la noche en la Escuela N º 21 D.E. 17 “Rompehielos General San Martín” situada en Santo Tomé 2836, Villa del Parque, Capital Federal. Todo, dos días después de que fuera la Guardia de Auxilio el 15/11 y asegurara que se podían seguir dictando clases. En la Escuela no hay clases desde hace tres días y no se vislumbran soluciones. Y claro, los alumnos y sus docentes son los más perjudicados, por el peligro a su integridad física y por tratarse de la época de las evaluaciones de fin de año e inscripciones para el año entrante.
La cuadrilla de auxilio había concurrido, solicitada ante la inestabilidad de la estructura. La insegura situación de los cimientos viene de larga data y en la misma Escuela, en la parte delantera de la misma se habían caído los techos el año pasado y esa obra, ya licitada, comenzó a realizarse este año. El derrumbe actual se produjo en otra área de la misma, en un aula del ala derecha al fondo, casi llegando la zona del Jardín de Infantes, donde concurren los más pequeños. Ante estos antecedentes, resulta inexplicable la imprevisión de las autoridades ministeriales.
Obviamente, los Padres, los alumnos y sus docentes, necesitamos respuestas ya; y aunque más no sea de manera provisoria que se acondicione la escuela para que Nuestros Hijos puedan finalizar su año lectivo. A tal efecto también se han librado actuaciones ante la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Bs. As. Y para el verano queda la demanda de soluciones en serio, para que los niños puedan concurrir el año que viene a clase sin ningún tipo de peligro, y para que este tipo de imprevisiones no vuelvan a repetirse más.
Tomado de Tribuna de periodistas
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